LA OUIJA Padre Jordi Rivero
Otros "juegos" basados en la adivinación: "JUEGO DE LA COPA", "LIBRO ROJO".
El Primer Mandamiento prohíbe
invocar espíritus. El Rey Saúl recurrió a una mujer para conjurar el
espíritu del difunto profeta Samuel y fue castigado por Dios (Cf. 1 Samuel 28, 8-17). Se trata del pecado de adivinación: querer "desvelar" el porvenir recurriendo a espíritus (que en realidad son demonios).
|
El
"juego" de la ouija consiste en poner las manos sobre una pequeña
plataforma que se desplaza lentamente sobre un tablero, movida por
alguna fuerza misteriosa. El tablero está inscrito con números y las
letras del alfabeto. Los jugadores esperan obtener respuesta a sus preguntas uniendo las
letras sobre las que se mueva la plataforma. La "diversión" está en la
curiosidad de comunicarse con algún espíritu que supuestamente revela
secretos. Cuanto más parezca "funcionar", más la ouija atrae y ata. Para
algunos, esto desemboca en una obsesión.
Mucha gente se ve atraída por la posibilidad de contactar con un ser querido ya muerto, otros sólo por curiosidad y otros para pasar el rato... La verdad es que con el tiempo la ouija va variando el destino del contactarte en función de las nuevas creencias. Por ejemplo hay quien la utiliza supuestamente para contactar con seres extraterrestres, seres de otras dimensiones, ángeles, ... En definitiva, parece que el juego del tablero hoy en día nos ofrece numerosas posibilidades. -autor desconocido
Orígenes de la ouija
Ya
Pitágoras (540 a.C.) usaba un artefacto parecido cuando se reunía en
"círculos" en los que "una tabla mística que se movía con ruedas" hacia
signos que el filósofo y uno de sus estudiantes interpretaban a la
audiencia como revelaciones del mundo invisible. En la China, antes del
nacimiento de Confucio, se usaba algo similar, lo que parecía ser una
forma "no peligrosa" de comunicarse con los espíritus de los muertos.
El mundo del ocultismo abrazó con entusiasmo a la ouija. En 1853, en Francia, el "espiritualista"
M. Planchette, diseñó una ouija similar a la que hoy día es popular.
Elija J. Nond, en USA, le hizo variaciones; William Fuld le compró los
derechos y un año después la patentó. Finalmente, en 1966, "Parker
Brothers" compró los derechos sobre el juego de la ouija y ha sido desde
entonces su fabricante. Sin embargo la ouija, en diferentes versiones,
se ha popularizado tanto que se puede obtener por infinidad de
medios.
"Parker
Brothers" y otros fabricantes de juegos de mesa, para aumentar el
mercado, han querido enterrar la relación de la ouija con el ocultismo. A
estos señores lo que les interesa es popularizar el juego para hacer
dinero. Prefieren decir que los jugadores buscan su "yo" subconsciente
para obtener respuestas. Según esta versión, la ouija trae a nuestra
conciencia lo que está oculto en nuestro subconsciente. Como una llave
para acceder a nuestro conocimiento interior. Pero eso es pura ficción
para cubrir una realidad más oscura. Cuando el hombre se abre a buscar
respuestas más allá de lo que se puede llegar por el uso de la razón
(estudio, lógica), entra en el campo de lo sobrenatural en el que sólo
hay dos caminos: Dios y el demonio.
El
mismo artículo arriba mencionado delata la verdad sobre este nefasto
juego cuando dice: "En definitiva (la ouija) es una manera más de
intentar acercarnos al mundo de lo oculto, en busca de información de
aquello que por el momento no podremos demostrar".
Ahora
existe una nueva versión de la ouija para el siglo XXI en la que se
juega por medio de un ordenador (computadora). Existe una versión en la
que se manipulan las respuestas del jugador sin que este lo sepa. Otras
versiones dan respuestas escogidas por la computadora al azar.
Si
alguno dudase la conexión entre la ouija y el ocultismo, solo necesita
hacer una búsqueda en el Internet para percatarse de la cantidad de
estos grupos que la utilizan para comunicarse con espíritus. De uno de
estos sitios traducimos al español: "La tabla Ouija es quizás uno de
los métodos mas controversiales para comunicarse con espíritus. Sobre
todo porque lo puede usar cualquiera y no requiere poderes especiales
para navegar. Quizás por esto la mayoría de los psíquicos desaconsejan su uso"
¿Cómo puede funcionar la ouija?
La
Iglesia aconseja no dar una explicación de orden sobrenatural a un
fenómeno que pueda ser explicado en el orden natural. Se deben
considerar las razones naturales del fenómeno antes de pensar en causas
preternaturales.
Para
muchos la ouija no funciona, se aburren y allí queda todo. Algunos
opinan que cuando la ouija se mueve es por causas fisiológicas o del
subconsciente. Dicen que se debe tomar en cuenta el
movimiento natural pero inconsciente de los músculos de los mismos
participantes, las fuerzas del cerebro, las tensiones psíquicas y otros
factores del cuerpo se reflejan en los movimientos musculares que a su
vez pueden mover un objeto.
Pero,
aunque nos permitamos pensar que el movimiento en si mismo sea un
fenómeno natural, ¿Como se explica el "deletreo automático" con mensajes
inteligibles? Muchos
dicen que refleja la actividad del subconsciente. El problema con esta
explicación es que no toma en cuenta que a veces son varias las personas
las que tienen sus manos sobre la ouija. Todos las manos no son movidas
por el mismo cerebro. En todo caso habría que preguntarse: ¿Que o
quien incita la mente, desde el subconsciente, a mover las manos a dar
un mensaje que el sujeto totalmente desconoce, a veces en un lenguaje
desconocido para todos los participantes? La verdad es que la ciencia no
tiene explicación.
Se
ha tratado ingenuamente de descartar la injerencia demoníaca basándose e
un experimento en el que no se logró un mensaje coherente cuando se
vendaron los ojos de los participantes y se cambió el orden de las
letras en el tablero. Argumentan que si fuese el demonio no hubiese
tenido dificultad de vencer esos obstáculos. Estos señores no comprenden
la sagacidad del demonio para esconderse cuando le conviene pasar
desapercibido. La ouija no siempre funciona.
El importe espiritual
Sabemos
por la revelación divina que el ser humano recibe mensajes de Dios (que
dice la verdad y edifica en el amor) pero también del demonio (que
tienta contra Dios). La Palabra de Dios con frecuencia nos advierte de
cuidar nuestros pensamientos y probar el origen de los mensajes. "Por
sus frutos los conocerán".
Numerosos
testimonios que hemos recibido indican que la ouija, cuando "funciona",
puede, al principio ser un mensaje atractivo (felicidad, dinero, algún
dato que el sujeto desconocía, etc.) Pero el lenguaje y las tácticas que
se manifiestan corresponden a lo que Jesús nos advierte que es
característico del demonio: Consejos contrarios a la moral, incitación a
la vanagloria, la curiosidad malsana, etc. Progresivamente desemboca en
amenazas, sugestión a causar violencia, suicidio, la desesperación o
presunción, invitaciones a desobedecer a Dios a cambio de alguna oferta
de bienestar, riquezas... Los resultados pueden ser, por ejemplo,
obsesiones, ansiedad, ataques de pánico, enfermedades, desórdenes
mentales. He visto muchos casos en que el sujeto se envicia con la ouija
y pierde el discernimiento de tal manera que justifica su uso aun
cuando percibe graves daños a su persona. Con el vicio, la opresión del
demonio aumenta. Hemos recibido testimonios alarmantes
de personas dominadas por el pánico, incapaces de dormir, verdaderamente
desesperadas, pidiendo auxilio.
Hay
que advertir que, aunque se use la ouija por curiosidad, se está
abriendo camino para el demonio y no es de extrañar que la persona quede
espiritualmente afectada. El bien que el sujeto pensaba percibir no se logra, resulta ser un engaño.
Las Sagradas Escrituras nos exhortan: "Sed sobrios y velad. Vuestro adversario, el Diablo, ronda como león rugiente, buscando a quién devorar" -I
Pedro 5,8. Esta advertencia es necesaria porque el demonio realmente
existe y realmente tiene acceso a nosotros por diversos medios. Puede
utilizar aun los movimientos naturales y el subconsciente para guiarnos
hacia el mal, tentarnos, confundirnos y asediarnos. Esto ocurre cuando
nosotros practicamos lo que está claramente prohibido por las Sagradas
Escrituras, como veremos mas adelante.
No
debemos buscar conocer sino lo que Dios nos quiera revelar, ya sea por
medio del uso natural de la razón sometida a Dios o por su revelación. Siendo
mucho más inteligente que nosotros, el demonio tiene conocimientos que
nos parecen maravillosos pero que los utiliza para atraparnos y
engañarnos. Puede además imitar voces y apariencias de personas que han
muerto.
Ciertamente
nadie que conozca y ame a Dios busca su dirección por medio de la
ouija. Dios se da a conocer (se revela), no por medio de juegos, sino a
través de Su Hijo, Jesucristo. El confió su revelación a Su
iglesia. Quien desea buscar la verdad debe acudir a las Sagradas
Escrituras y a las enseñanzas de la Iglesia. Entonces, con el corazón
abierto al Espíritu Santo sabremos como aplicar las enseñanzas a la vida
diaria.
Algunos
empiezan a jugar ignorantes del mal que hacen. Pero lamentablemente
muchos juegan por soberbia, pues sabiendo que ofenden a Dios continúan
haciéndolo. Muchos me escriben, aún después que les he explicado sobre
estas cosas, no buscando salirse sino preguntándome sobre el significado
de los mensajes que aparecen cuando juegan. Estos pobres no entienden
de razones y solo queda rezar por ellos. Quede claro que escribo para
alertar a los que no saben lo que es la ouija y ayudar a los que de
verdad se quieran arrepentir.
No
se puede justificar el uso de la ouija con el pretexto de entretenerse y
curiosear en lo oculto. La verdad es que al jugar con la ouija se abre la puerta al demonio cuyo objetivo es llevarnos el infierno.
El Primer Mandamiento
prohíbe apelar a otro espíritu fuera de Dios. El rey Saúl recurrió a
una mujer de Endor para conjurar el espíritu del difunto profeta Samuel y
fue castigado por Dios (1 Sam 28: 8-17). Se trata del pecado de adivinación: querer "desvelar" el porvenir recurriendo a espíritus (que en realidad son demonios).
Pero, ¿no rezan los católicos a los santos? Esto es muy diferente por varias razones:
1- Jamás invocamos a los santos por medio de oráculos o adivinación. Nos limitamos a pedirles que recen por nosotros y que nos ayuden en nuestro peregrinar hacia el cielo.
2- Jamás buscamos en los santos otro camino u otro conocimiento sino el Evangelio ya proclamado por Jesucristo.
Ver también: "¿Pueden visitarnos las almas del purgatorio?"
1- Jamás invocamos a los santos por medio de oráculos o adivinación. Nos limitamos a pedirles que recen por nosotros y que nos ayuden en nuestro peregrinar hacia el cielo.
2- Jamás buscamos en los santos otro camino u otro conocimiento sino el Evangelio ya proclamado por Jesucristo.
Ver también: "¿Pueden visitarnos las almas del purgatorio?"
Un defensor de la ouija escribe: "...aunque
tradicionalmente se considera a la ouija un juego, los expertos de todo
el mundo nos recomiendan que podemos disfrutar de ella, pero sin
perderle el respeto." Estos "expertos" se
contradicen. Por un lado nos dicen que la ouija es solo un juego y
rechazan toda advertencia de peligro contra ella, pero al mismo tiempo nos
dicen que le tengamos "respeto". Entonces, ¿Es un juego o es algo
serio? Si estos "expertos" le tuvieran respeto a Dios no quisieran
ofenderle buscando en la ouija lo que sólo Dios puede dar: la verdad.
Es cuestión de fidelidad.
Alguno me acusa de que mi oposición a la ouija "coarta la mente de la persona que le gusta indagar en lo oculto, priva a la mente humana de la investigación responsable".
Debo aclarar que no coarto a nadie. A quien quiera jugar a la ouija
solo le advierto en lo que se está metiendo. Queda libre para decidir.
En cuanto a "investigación responsable", nada tiene que ver con la
ouija. La verdadera investigación utiliza la razón que es un don de
Dios, mientras que con la ouija no se razona.
No
es "investigación" tirarse de un décimo piso para ver que ocurre. Los
peligros, especialmente los peligros para el alma, se conocen a la luz
de nuestra alianza de fe con Dios. No hacemos lo que Dios prohíbe para
"investigar" ¿Hacían "investigación responsable" Adán y Eva cuando
comieron del fruto prohibido?.
La ouija nos atrae por la curiosidad y por la soberbia.
En un artículo favorable a la ouija leemos:
"(La ouija) nos conquista haciéndonos creer que somos seres fabulosos, reencarnaciones de personajes famosos, ... De modo que se hace casi irresistible volver a conectar para recabar más información."
El mismo artículo descarta todo peligro justificando que podemos mantener el control de la situación:
"Así que mientras no te olvides que eres tú quien debe llevar la voz cantante se supone que no pasará nada."
¿Se
supone que no pasará nada? Es notable la semejanza entre esta
mentalidad moderna y la tentación de la serpiente en el paraíso:
Replicó la serpiente a la mujer: «De ninguna manera moriréis. Es que Dios sabe muy bien que el día en que comiereis de él, se os abrirán los ojos y seréis como dioses, conocedores del bien y del mal.» -Génesis 3,4-5
El demonio, sigue ofreciéndonos los consejos que le dieron tan buen resultado con nuestros primeros padres: "no morirán... serán como dioses". Entonces ridiculiza a quién vea el peligro detrás de sus "juegos".
Los efectos no son automáticos.Puede
ser que se juegue inocentemente con la ouija pensando que es un mero
juego de azar, sin invocar espíritus. Puede que en estos casos no se
perciba daño alguno. No hay pecado mientras no se haga conscientemente
lo que Dios prohíbe. El enemigo no es omnipotente. Debe esperar a que su
presa se adentre en la trampa y se abra a la curiosidad de buscar
respuestas y mensajes lo cual es adivinación. Pero cuando se le toma
gusto al juego y se invocan espíritus se entra en el campo de la
adivinación y eso es dañino.
La
famosa película "El Exorcista", aunque en algunos aspectos fue
extensamente dramatizada al estilo Hollywood, está basada en un caso
real de exorcismo en cual la puerta de acceso del demonio fue el juego
de OUIJA. Allí se detallan los distintos procesos o estadios que se
suceden en un caso de posesión, y que efectivamente acontecieron en este
caso.
En la
película el demonio mata a un personaje. Esto no sucedió y responde al
interés dramático de la trama. El demonio no puede
arrebatar directamente la vida a nadie. Pero sí puede engañar hasta que
la persona misma se haga daño.
En
los últimos años he acumulado numerosos testimonios de personas que
usaron la ouija y experimentan serios trastornos espirituales,
emocionales, psicológicos y físicos. Han buscado ayuda de profesionales y
no se encuentra causa aparente. Abundan los casos de pánico, angustia,
depresión, insomnio. En muchos casos sus familiares y amistades se
lamentan que la persona ha dado un cambio tan fuerte hacia el mal que no
parece la misma.
¿Qué hacer?
Cuide
de que la ouija no entre en su hogar. No se deje influenciar por los
que dicen que es sólo un juego inofensivo. Una mente consagrada a Dios
tiene en El su guía y no se abre al vacío para buscar respuestas.
Si
recuerdas haber invocado algún espíritu sea por la ouija u otra manera:
No temas. Dios te ama y quiere salvarte. Si te arrepientes y le
entregas tu vida a Jesucristo el te liberará. Confiésate (Se trata de un pecado contra el Primer Mandamiento). CONFIA en su PERDON. Jesús te ama y te dará una vida nueva.
Aquí encontrarás una oración de Renuncia a Satanás y consagración a Jesucristo.
Comprométete con Dios a jamás recurrir a la superstición ni a lo oculto. Solo Dios es fuente de verdad.
Regresa al Señor con el deseo de ser un buen cristiano. NO TEMAS. Dios
es infinitamente poderoso y misericordioso. Dios ha venido a salvarnos.
Todos necesitamos entrar por el Camino de Su gracia que se nos ha dado
en la Iglesia. Si haces esto, el enemigo nada podrá contra ti por mucho
que amenace.
Señor, "no nos dejes caer en la tentación y líbranos del maligno". Amén.
En
vez de buscar espíritus malos ya derrotados por Cristo, abre tu corazón
al Espíritu Santo. Pídeselo a Dios Padre en nombre de Jesús. Oración al Espíritu Santo
Otra opinión y testimonios...
Era un buen chico. “Le gustaba jugar al fútbol y, cuando estudiaba, era muy bueno para varias asignaturas, entre ellas las
matemáticas”, comentó uno de sus amigos cercanos. Lo recordaban
con nostalgia, pero él tomo una mala decisión. A mediados de junio del
2012, Julio César Miranda, se apuñaló a sí mismo varios
días después de haber jugado con la tabla Ouija y mostrar un
comportamiento de poseso demoníaco.
Hizo
prácticas con ese objeto misterioso convenciendo a varios amigos. Sólo
una chica se atrevió a profundizar en el juego. Ella también
terminó bajo posesión del demonio. Los hechos ocurrieron en el
puerto de Buenaventura, en el occidente de Colombia y acapararon los
titulares de los diarios. El muchacho no había cumplido aun los
18 años.
"El era
un buen hijo; dibujaba muy bien, aunque yo diría que excelente. De un
momento comenzó a cambiar, después de haber jugado con
esa tabla", dijo su madre Mery Campaz.
La mujer relató, sin poder contener el llanto, que Julio César comenzó a
llamar a Belcebú (Satán), de quien decía era su padre y que a él le debía obediencia. En alguna ocasión salió de casa desnudo,
hizo sus necesidades fisiológicas en plena calle y les lanzó las heces a
varias personas que lo golpearon. Nadie comprendía por qué actuaba así.
Este joven
estudiante que –curiosamente--, residía en el barrio Puerta del Cielo,
vivía acosado por esa extraña posesión demoniaca. En
cierta ocasión le dijo a su madre que si llegaba a observar un
comportamiento extraño, no dudara en intervenir ya que había recibido
órdenes del propio Satanas de sacrificarlas a ella y a su
hermana.
Horas
después, en medio de movimientos y gritos, se hirió con un cuchillo en
el estómago. En el Hospital donde lo atendieron, pronto le
dieron de alta, pero al regresar a casa, murió. Su amiga cercana,
que también jugó con la Ouija, fue llevada al centro hospitalario para
recibir tratamiento sicológico.
Historia de la tabla Ouija
La tabla güija o ouija
es un tablero dotado de letras y números con el que supuestamente se
puede entablar contacto con los difuntos. Es muy similar al juego de
la copa, en el que se coloca una copa boca abajo rodeada por las letras
del alfabeto y los participantes colocan el dedo
índice en la base de la misma.
La tabla Ouija es una puerta de entrada a los demonios, como está ampliamente
documentado…
|
Su origen
específico es indeterminado –inventor y fecha de creación--, aunque se
estima que fue el producto del auge espiritista que tuvo
lugar en el siglo XIX. No obstante, se patentó como invento el 28 de
mayo de 1890. Quedó registrado como propietario de los derechos, Elijah
J. Bond y William H. A. Maupin y Charles W. Kennard,
como acompañantes en todo el proceso de oficialización de la
propiedad. Eran practicantes del ocultismo.
Llamaron a la Ouija inicialmente “planchitas” o tablas parlantes. Eran muy similares a las que circularon en Estados
Unidos.
Charles
Kennard estableció una fábrica de tableros y ese mismo año, en 1890,
comenzó a comercializarla. Aseguraba que provenía de Egipto,
para darle un matiz de misterio.
Posteriormente
la patente fue vendida a William Fuld, antiguo empleado de Kennard,
cuya compañía comercializó el juguete hasta que Parker
Brothers adquirió los derechos en 1966. Fue Fuld quien afirmó que la
palabra ouija era una mezcla de los vocablos oui y ja,
que significan ‘sí’ en francés y alemán
respectivamente. Lo que se ha demostrado completamente falso ha sido
que su origen se remonte a la época egipcia. Actualmente, otras
empresas comercializan este juguete con diferentes
nombres.
Puerta a lo sobrenatural
Practicar
la Ouija abre puertas al mundo de lo oculto. Desde el punto de vista
religioso el análisis apunta no a la falta de efectividad
de la güija sino precisamente a su efecto. Varios exorcistas
coinciden en asegurar que jugar a la ouija equivale a dar paso a
entidades sobrenaturales malignas del más allá, que pueden causar
daño a los jugadores.
Víctimas fatales de la Tabla Ouija
Sinnúmero de practicantes del juego
con la tabla Ouija han terminado endemoniados… Algunos acuden al suicidio…
|
El
25 de noviembre del 2007, tal como lo registran notas de prensa que
usted puede
consultar en la Internet, cinco adolescentes de Valencia (España)
jugaron con la tabla Ouija. Lo hicieron en una casa abandonada.
Prepararon un altar y comenzaron con el juego de la mano de uno de los chicos que oficiaba de “portavoz” en el
juego. La primera pregunta que realizo fue: “…si la presencia de alguno de nosotros te molesta, dinos quien es y se marchará”; enseguida el puntero
de la tabla marco tres nombres quienes mirándose sorprendidos, decidieron marcharse enseguida de la sesión.
Después de haber caminado unos escasos 80 metros lejos de la casa, los chicos sintieron un ruido estruendoso y cuando voltearon para ver que había pasado, vieron como la casa abandonada se derrumbaba sobre los dos
chicos que se habían quedado jugando con la Ouija.
Andrea, una chica venezolana, residente en Caracas, quien perdió a su madre a los 15 años de edad, sorprendió al
mundo con su historia. El 30 de enero de 2006 se reunió con varias amigas para jugar con la tabla misteriosa. Iniciaron
la sesión realizando la típica pregunta si se trataba de un
espíritu bueno o malo el que respondía por la Ouija, y la entidad
comenzó a deletrear el nombre de Andrea reiteradas veces, junto con
fechas que eran muy significativas para su familia.
Tres jovencitas comenzaron a evidenciar, poco después, una posesión demoníaca, excepto Andrea quien estuvo detenida
tres días.
Meses más tarde, la chica llegó a la conclusión de que la entidad que se
presentó durante esa sesión se la Ouija había sido su “madre”,quien solía ser muy posesiva y no la dejaba tener ningún tipo de amistad ni
relación con otras personas.
Satanismo tras la Ouija
Un registro periodístico del 22 de diciembre de 1995, es uno de los más sorprendentes por todo lo que envuelve su
historia. Ocurrió en los Estados Unidos con
Denis y David, dos chicos satanistas de 20 años que utilizaban la Ouija para comunicarse con quien ellos llamaban su “amo”.
David convenció a Dennis y otros dos amigos, en horas de la noche, de ir a casa a escuchar música; sin
embargo, cuando entraron en la habitación descubrieron un altar iluminado con velas y cubierto con un
paño negro en donde se
encontraba situada una tabla Ouija. Los cuatro chicos aceptaron
participar de la sesión, y así fue como comenzaron a formular
preguntas. Uno de ellos al percibir una presencia consultó: “Si eres Satanás dime que quieres y lo
hago”.
Cuando dos de los chicos decidieron interrumpir el juego, y justo cuando cruzaban el umbral de la
habitación, Dennis sacó una navaja y tomo a uno de los chicos por el cuello, diciéndole que nadie se
iría a ningún lugar hasta que la voluntad de su amo se cumpliera. Apuñaló en varias ocasiones a su víctima.
Al día siguiente encontraron el cuerpo del joven completamente descuartizado y a David
y Dennis durmiendo prácticamente bañados en su sangre. A
Ambos los condenaron por homicidio
no premeditado ya que Dennis aseguraba que unas voces en su cabeza
le ordenaban cometer el asesinato y lógicamente fue enviado a un
Instituto psiquiátrico en donde se alojan a los asesinos
dementes.
Por su parte David se recuperó en un hospital psiquiátrico, y hoy en día lleva una vida normal, aunque carga con
los estigmas de haber participado en una escena tan horrorosa.
Satanás tras los engaños
Es evidente que sólo acudiendo a Jesucristo, quienes
están inmersos en posesiones demoníacas por jugar con la tabla Ouija,
pueden ser libres…
|
No
entraré a cuestionar la idea que tenga respecto a si es buena o mala la
utilización de la Tabla Ouija. No
obstante, le invito a considerar el sinnúmero de casos documentados
que se hallan publicados en la Internet, y quedan cuenta de las
posesiones demoníacas como consecuencia de esta
práctica.
Es un engaño moderno de Satanás y de sus huestes. Él desde el comienzo de los siglos ha querido envolver al género
humano en las trampas, que terminan afectando su mente y por tanto, su comportamiento, como lo advirtió el apóstol Pablo: "Pero temo que,
así como la serpiente, con su astucia, sedujo
a Eva, también ustedes se dejen corromper interiormente, apartándose
de la sinceridad debida a Cristo" (2 Cor 11,3).
El propio Señor Jesús denunció que desde siempre, el diablo no sólo ha sido mentiroso, sino que su naturaleza está
ligada al propósito de causar daño al género humano: "Ustedes tienen por padre al demonio
y quieren cumplir los deseos de su padre. Desde el comienzo él fue homicida y no tiene nada que ver con la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando miente, habla conforme a lo que es, porque es mentiroso y padre de la mentira.
8:45 Pero a mí no me creen,porque les digo la verdad." ( Jn 8,44-45)
y quieren cumplir los deseos de su padre. Desde el comienzo él fue homicida y no tiene nada que ver con la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando miente, habla conforme a lo que es, porque es mentiroso y padre de la mentira.
8:45 Pero a mí no me creen,porque les digo la verdad." ( Jn 8,44-45)
La Tabla Ouija es uno de sus engaños más atrayentes. Incluso, se han creado versiones para ser utilizadas en un
ordenador o simplemente en el teléfono. ¡No hay duda de que la creatividad del mundo de las tinieblas no tiene límites!
Satanás procura traer engaño a nuestra mente. La maquinación de Satanás puede ser tan
sutil como el mismo demonio de Jezabel que es engaño. Si está con esas estratagemas, con esas ideas, que son de Satanás no son de Dios, y
lleva a cabo las ideas que el enemigo ha puesto en su mente, usted va a ser un perdedor como cristiano.
No olvide que el propósito es “... que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus maquinaciones.”(2
Corintios 2,11) ¿Por qué lo hace él así? Porque procura nuestra destrucción. El Adversario porque como instruye el apóstol
Pablo: “…no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz.”(2 Corintios
11,14)
OTRA FUENTE: El Observador de la Actualidad
Escrito por Autores varios
OTRA FUENTE: El Observador de la Actualidad
La ouija y sus peligros I |
De la búsqueda de diversión al peligro - «Juguetes» que no lo
son - Una práctica contra el primer mandamiento - Atrapados por la
ouija
De la búsqueda de diversión al peligro
Lo que vivió una atea con la ouija. Tras la mala experiencia, Jennifer Fulwiler comenzó a Creer en Dios y se hizo católica
Jennifer Fulwiler hoy es una conversa al catolicismo que da testimonio de los peligros del contacto con el juego de la ouija (güija según la Academia) y cualquier otra herramienta de invocación a los espíritus.
«Justo antes del año nuevo, mi mejor amiga y yo trajimos su viejo tablero de ouija.Ella me explicó una serie de normas que se suponía debía seguir antes de poner las manos en la tablita, ya que ‘podía haber algo real aquí'. Pero yo me enorgullecía de ser una pura atea materialista, ¡ninguna advertencia sobre espíritus malévolos podía asustarme!
«Confiaba en que esto aseguraría mi lugar como la persona más racional de 16 años de edad en el universo. Así, demostraría mi no superstición haciendo una gran broma sobre todo el asunto. Para gran preocupación de mi amiga, me burlaba de los supuestos espíritus.
«Unas semanas más tarde decidimos jugar con la tablilla de nuevo, así que mi amiga la trajo a mi casa. Entonces una noche, alrededor de las tres de la mañana, me desperté al escuchar un sonido de pelea violenta a la derecha de mi cama. Me imaginé que era el gato ‘luchando' con uno de mis animales de peluche. Encendí mi lámpara para calmarlo, pero mi gato estaba profundamente dormido a los pies de mi cama. Y bajo una pila de almohadas encontré la ouija.
El resto de ese año fue horrible: estuve involucrada en varios accidentes de auto y viví otras cosas malas, pero lo peor de todo era que estaba sumida en un extraño tipo de depresión. Yo había experimentado episodios de depresión antes, pero ésta era diferente, con algo más oscuro. Era un constante sentido de la fatalidad, un miedo que me infectaba a un nivel molecular (aunque no sabía a qué le tenía miedo). Y también me vino como una racha de odio virulento, que me hacía llegar a la mente las más extrañas respuestas (aunque no siempre las hablaba) ante las provocaciones más insignificantes.
«No era como si yo experimentara una versión infeliz de mí, sino que era como si yo misma hubiera sido atada y encerrada en un sótano en algún lugar, y mi cuerpo fuera una casa abandonada.
«Durante años me obstiné en la idea de que no había nada en el tablero de la ouija. Aun cuando por primera vez comencé a creer en Dios, yo todavía pensaba que no podía haber nada peligroso en jugar con un juguete de cartón comprado por la mamá de mi amiga.
«Empecé a leer la Biblia, y vi cómo a menudo incluso el Nuevo Testamento habla acerca de los malos espíritus y sus poderes. Aprendí más sobre la realidad de las fuerzas sobrenaturales buenas y malas, y la importancia de saber distinguir una de la otra. Y cuando me acordé de mi experiencia con la ouija, vi que a pesar de que la ‘herramienta' que había utilizado podía haber llegado en forma de un juego de mesa de 20 dólares, yo había participado en un evento cuyo objetivo era convocar a los espíritus para nuestra diversión. Y me di cuenta de que tenía todos los signos de un grave ataque espiritual.
«Creo que la razón por la que las incursiones en el ocultismo han tenido un atractivo cada vez mayor en las últimas décadas es simplemente porque la gente se aburre, y anhela distracciones interesantes. En cambio, el Espíritu Santo habla con una voz apacible, pequeña. Dios no suele hacer muchas cosas espectaculares. Usted probablemente pueda recoger historias más emocionantes mientras incursiona en lo oculto que las que podría experimentar mientras está llevando su cruz detrás de Cristo. Es que el mal tiene más glamour que una vida fiel a Dios».
«La gente está abandonando a Dios y entregándose al ocultismo, que es tan terrible para el alma, como el mismo Infierno.
«Las sesiones de espiritismo, en las que se evoca a los muertos para conseguir respuestas, están muy difundidas. Ahora se enseña a efectuar sesiones de espiritismo a través de computadoras, teléfonos celulares... Ya ni siquiera se necesita un ‘médium', cada quien puede hacerlo por sí mismo.
«De acuerdo con encuestas, el 37 % de los estudiantes han hecho, por lo menos una vez, el juego de la ouija, una verdadera sesión de espiritismo donde en verdad se invoca a los demonios y no a los difuntos como se cree, y quienes lo juegan sentirán la presencia real y maligna de estos espíritus del Infierno, ya que se los está llamando.
«Muchas personas terminan mal, trastornadas físicamente y psicológicamente. No pueden dormir, sienten la presencia de seres malignos que les rodean y le persiguen. De día y de noche se sienten angustiadas. Y es debido a la invocación de los espíritus.
«No existe diferencia entre magia blanca y magia negra. Cuando la magia funciona, siempre es obra del demonio. Todas las formas de ocultismo son puertas abiertas para el demonio y sus ángeles caídos».
P. Gabrielle Amorth, exorcista de la diócesis de Roma
«Juguetes» que no lo son
Aunque ya no es tan común verlas en los anaqueles de las tiendas, los tableros de la ouija se han comercializado en México por décadas como si se tratara de simples juegos como el ajedrez, las damas chinas o el dominó; y, de hecho, los mismos fabricantes de los verdaderos y tradicionales juegos de mesa también suelen manufacturar los tableros ouija para la práctica de espiritismo.
Hoy en el mundo hay de todo: ouijas de colección, ouijas que son un verdadero homenaje a la mariguana, guitarras eléctricas con ouija incluida, ouijas de valor artesanal, etc. Así se promocionaba en febrero de 2010 la venta de unas ouijas en el «Mercado Juárez» de Monterrey, Nuevo León, a través de un anuncio en internet: «¡Ouijas únicas, $380 pesos! Talladas en madera, elaboradas 100% a mano y ritualizadas libres de energías negativas, listas para ser utilizadas como portal de comunicación con el mas allá».
Pero lo más terrible es el descarado intento de introducir a los infantes en el mundo del satanismo y el ocultismo, pues ya se fabrican tableros ouija con las letras y números en alegres colores para que los niños en edad preescolar les tomen gusto; y la empresa Hasbro vende desde hace varios años en algunos países un lindo tablero ouija de color rosa para las niñas.
D.R.G.B.
Una práctica contra el primer mandamiento
«Cuida que la ouija no entre en tu hogar. No te dejes influenciar por los que dicen que es sólo un juego inofensivo: es un pecado contra el Primer Mandamiento. Si recuerdas haber invocado a algún espíritu a través de la ouija o de otra manera, arrepiéntete, confiésate y entrégale tu vida a Cristo, comprometiéndote a nunca más recurrir al ocultismo».
Este llamado lo hace el padre Jordi Rivero, fundador de la página www.corazones.org de la congregación de las Siervas de los Corazones Traspasados de Jesús y María, y unos de los sacerdotes católicos de habla española más activos en internet. El padre Jordi ha escrito varios artículos acerca de la ouija y de su incompatibilidad con la fe cristiana. Resumimos algunas de las ideas principales: .
- El «juego» de la ouija consiste en poner las manos sobre una pequeña plataforma que se desplaza sobre un tablero con números y letras, movida por alguna fuerza. La «diversión» está en la curiosidad de comunicarse con algún espíritu que supuestamente revela secretos.
- Mucha gente se ve atraída por el deseo de contactar con un ser querido ya muerto, otros sólo por curiosidad y otros para pasar el rato. Hay quien la utiliza para contactar con «extraterrestres» o con supuestos «ángeles».
ORÍGENES DE LA OUIJA
- Ya Pitágoras (540 a.C.) usaba «una tabla mística que se movía con ruedas» hacia signos que él y uno de sus estudiantes interpretaban a la audiencia como revelaciones del mundo invisible.
- En la China, antes del nacimiento de Confucio, se usaba algo similar con la pretensión de comunicarse con los espíritus de los muertos.
- La ouija, tal como hoy se conoce, fue diseñada en 1853, en Francia, por M. Planchette. En Estados Unidos, Elija J. Nond le hizo variaciones, y William Fuld la patentó. Finalmente, en 1966, «Parker Brothers» compró los derechos sobre la ouija.
CÓMO FUNCIONA
- «Parker Brothers» y otros fabricantes intentan enterrar la relación de la ouija con el ocultismo, por eso dicen que los jugadores buscan su «yo» subconsciente para obtener respuestas.
- La verdad es que, cuando el hombre se abre a buscar respuestas más allá de lo que se puede llegar por el uso de la razón, entra en el campo de lo sobrenatural, en el que sólo hay dos caminos: Dios y el demonio.
- La Iglesia aconseja no dar una explicación sobrenatural a lo que pueda ser explicado en el orden natural. Pero en ocasiones la ciencia no tiene explicación para la ouija.
- Numerosos testimonios indican que la ouija, cuando «funciona», suele dar consejos contrarios a la moral, y luego, progresivamente, desemboca en amenazas, violencia, suicidio, desesperación o presunción. Los resultados pueden ser obsesiones, ansiedad, ataques de pánico y otros desórdenes.
- Aunque se use la ouija por curiosidad, se está abriendo camino para el demonio y no es de extrañar que la persona quede espiritualmente afectada.
DIOS ADVIERTE
- Las Sagradas Escrituras nos exhortan: «Sed sobrios y velad. Vuestro adversario, el Diablo, ronda como león rugiente, buscando a quién devorar» (I Pe 5,8). Esta advertencia es necesaria porque el demonio realmente existe y realmente tiene acceso a nosotros por diversos medios, y es más fácil cuando practicamos lo que está claramente prohibido por Dios.
- Nadie que conozca y ame a Dios busca dirección por medio de la ouija. Dios se revela no por medio de juegos sino a través de su Hijo, Jesucristo, y Él confió su revelación a su Iglesia. Quien desea buscar la verdad debe acudir a las Escrituras y a las enseñanzas de la Iglesia.
- El Primer Mandamiento prohíbe apelar a otro espíritu fuera de Dios. El rey Saúl recurrió a una mujer de Endor para conjurar el espíritu del difunto profeta Samuel y fue castigado por Dios (cfr. I Sam 28, 8-17). Se trata del pecado de adivinación: querer «desvelar» el porvenir recurriendo a espíritus (que en realidad son demonios).
- No es lo mismo orar a los santos que invocar espíritus: 1) En la oración jamás se invoca a los santos por medio de oráculos o adivinación, sino que nos limitamos a pedirles que recen por nosotros y que nos ayuden en nuestro peregrinar hacia el Cielo. 2) Jamás buscamos en los santos otro camino u otro conocimiento sino el Evangelio ya proclamado por Jesucristo.
Atrapados por la ouija
Para conocer de qué tamaño es ya el problema de la ouija basta con recurrir al sitio católico www.corazones.org, donde se lee una gran cantidad de consultas, especialmente de adolescentes. Aquí extractamos tanto algunos de esos correos como las respuestas dadas por el padre Jordi Rivero:
- Tengo 15 años y una gran curiosidad por jugar al juego de la copa (ouija); pero tengo mucho miedo de que el espíritu se quede en mi casa.
- Hay cosas que no hay que probar para saber que son muy dañinas. ¿Se te ocurre tirarte de un edificio por curiosidad? Claro que no. La razón de tu curiosidad por la ouija es que te has alejado de Jesucristo. Tienes un vacío en tu alma que sólo Él puede llenar .
- Unos amigos quieren jugar a la ouija. Por mucho que les diga yo, no lo podré evitar. ¿Y si hago un tablero falso para que no pase nada?
- No es el tipo de tablero sino la intención de adivinación lo hace que la ouija sea pecado.
- He intentado una millonada de veces a la ouija, pero cuando yo estoy nunca se ha movido, ¿será porque Dios me está protegiendo?
- Dios te ama y te ha protegido; pero si insistes en abandonarlo, no te va a retener contra tu voluntad.
- Tengo 17 años. Intentamos muchas veces jugar pero no logramos que se moviera la copa.
- Muchas veces no ocurre nada porque el demonio no es todopoderoso y no siempre puede actuar.
-Jugamos con la ouija, pero no sabemos si fue válido porque lo hicimos en una caja de cartón.
- Nada es válido cuando es contrario al amor de Dios. Por ejemplo, si alguien te insulta, no importa si lo hace por escrito o a viva voz. El mal es mal, no importa como venga envuelto.
- ¿Si Dios no quiere que juguemos con espíritus, por qué no nos da Él mismo las respuestas?
- Dios ya nos las dio: nos reveló todo lo necesario para conocerle y salvarnos.
- No soy católico. En realidad me gusta más conversar con el Diablo que con Dios. Creo que existe Dios, pero no lo adoro. He jugado a la copa, y en unos días voy a pactar con el Diablo porque lo que le pida él me lo va a dar.
- Muchos esperan del demonio regalos. No comprenden que al recurrir a él caen bajo su dominio en calidad de esclavos.
- Mis amigos y yo tenemos demasiadas ganas de jugar. Yo creo en Dios y siempre rezo, voy a Misa, y sé que después de que juegue me debo ir a confesar; pero quiero jugar solamente una vez, aunque tengo miedo de que la ouija me haga algo.
- Si amas a alguien no le querrás insultar «sólo una vez». Fíjate que en ningún momento has pensado en el amor de Dios, sólo en tu propio miedo. Descubre tu egoísmo y renuncia al mal. En cuanto a esas confesiones premeditadas antes del pecado, recuerda que la confesión no es válida si no hay arrepentimiento y dolor del pecado. No sabes si tendrás arrepentimiento después de pecar si ahora mismo no lo hay.
- Tengo 16 años y juego a la ouija desde mis 8. Sólo ha contactado conmigo el «Demonio José». Tras varios años de amistad con él, me ha dicho que quiere convertirme en mensajero del diablo, prometiéndome muchas cosas hermosas. Creo que es mejor estar del lado del diablo que entrometerse en su camino.
- El demonio ha logrado envenenar tu alma y hacerte creer que es mejor estar de su parte; habiendo logrado eso no tiene necesidad de más.
- Tenemos 17 años. Estudiamos en un colegio católico y nunca nos han dicho que la ouija sea mala. Siempre nos dicen los espíritus con los que jugamos que son buenos y nos hablan muy bien sobre Dios. Nunca nos sucedió nada malo.
- Ustedes dicen que nada malo les ha ocurrido con la ouija. Les digo que sí: cada vez que juegan se van apartando de Dios. La ouija parece decirles cosas bonitas: es la estrategia del demonio, pues sabe que hablando «bonito» es la mejor manera de engañarles. El diablo se presta aun a rezar si con eso puede engañar.
- Deseo probar la ouija, no le tengo miedo a Satanás. No creo mucho en Dios, y no me conteste que rezará por mi alma porque, para ser verdad, tampoco creo en el Cielo. Si no me contesta me veré obligado a satisfacer mi curiosidad.
- Me da mucha pena tu actitud de desprecio a Dios. Si tuvieras mas interés en conocerlo, lo encontrarías y serías feliz. Tratas de amenazarme diciendo: «si no me contesta me veré obligado a satisfacer mi curiosidad». Eres libre y nadie te obliga. Tus decisiones tendrán consecuencias. Si haces el mal me dará pena, pero eres tú mismo quien te haces daño. Yo también soy libre y, por eso, aunque no lo aprecies, rezaré por ti para que abras tu corazón al amor de Dios.
- Tengo muchos amigos y amigas que juegan a la ouija y me invitan, pero aún no estoy convencido. Nos vamos a reunir en Halloween en un cementerio; están tan alucinados que quieren empezar a las 12:00 de la noche, y con velas negras. Deme cinco razones para no jugar.
- Parece que aún no entiendes. La vida en la tierra es muy corta y después será la vida eterna. Ahora te estas jugando la eternidad. Ahora me pides cinco razones para no jugar, pero sólo te daré una razón: la ouija no es de Dios, jugarla es andar por caminos de perdición y exponerte a perder tu alma. Allá tú. Si no tienes seriedad en lo que debe ser serio no habrá manera de que te pueda convencer.
Lo que vivió una atea con la ouija. Tras la mala experiencia, Jennifer Fulwiler comenzó a Creer en Dios y se hizo católica
Jennifer Fulwiler hoy es una conversa al catolicismo que da testimonio de los peligros del contacto con el juego de la ouija (güija según la Academia) y cualquier otra herramienta de invocación a los espíritus.
«Justo antes del año nuevo, mi mejor amiga y yo trajimos su viejo tablero de ouija.Ella me explicó una serie de normas que se suponía debía seguir antes de poner las manos en la tablita, ya que ‘podía haber algo real aquí'. Pero yo me enorgullecía de ser una pura atea materialista, ¡ninguna advertencia sobre espíritus malévolos podía asustarme!
«Confiaba en que esto aseguraría mi lugar como la persona más racional de 16 años de edad en el universo. Así, demostraría mi no superstición haciendo una gran broma sobre todo el asunto. Para gran preocupación de mi amiga, me burlaba de los supuestos espíritus.
«Unas semanas más tarde decidimos jugar con la tablilla de nuevo, así que mi amiga la trajo a mi casa. Entonces una noche, alrededor de las tres de la mañana, me desperté al escuchar un sonido de pelea violenta a la derecha de mi cama. Me imaginé que era el gato ‘luchando' con uno de mis animales de peluche. Encendí mi lámpara para calmarlo, pero mi gato estaba profundamente dormido a los pies de mi cama. Y bajo una pila de almohadas encontré la ouija.
El resto de ese año fue horrible: estuve involucrada en varios accidentes de auto y viví otras cosas malas, pero lo peor de todo era que estaba sumida en un extraño tipo de depresión. Yo había experimentado episodios de depresión antes, pero ésta era diferente, con algo más oscuro. Era un constante sentido de la fatalidad, un miedo que me infectaba a un nivel molecular (aunque no sabía a qué le tenía miedo). Y también me vino como una racha de odio virulento, que me hacía llegar a la mente las más extrañas respuestas (aunque no siempre las hablaba) ante las provocaciones más insignificantes.
«No era como si yo experimentara una versión infeliz de mí, sino que era como si yo misma hubiera sido atada y encerrada en un sótano en algún lugar, y mi cuerpo fuera una casa abandonada.
«Durante años me obstiné en la idea de que no había nada en el tablero de la ouija. Aun cuando por primera vez comencé a creer en Dios, yo todavía pensaba que no podía haber nada peligroso en jugar con un juguete de cartón comprado por la mamá de mi amiga.
«Empecé a leer la Biblia, y vi cómo a menudo incluso el Nuevo Testamento habla acerca de los malos espíritus y sus poderes. Aprendí más sobre la realidad de las fuerzas sobrenaturales buenas y malas, y la importancia de saber distinguir una de la otra. Y cuando me acordé de mi experiencia con la ouija, vi que a pesar de que la ‘herramienta' que había utilizado podía haber llegado en forma de un juego de mesa de 20 dólares, yo había participado en un evento cuyo objetivo era convocar a los espíritus para nuestra diversión. Y me di cuenta de que tenía todos los signos de un grave ataque espiritual.
«Creo que la razón por la que las incursiones en el ocultismo han tenido un atractivo cada vez mayor en las últimas décadas es simplemente porque la gente se aburre, y anhela distracciones interesantes. En cambio, el Espíritu Santo habla con una voz apacible, pequeña. Dios no suele hacer muchas cosas espectaculares. Usted probablemente pueda recoger historias más emocionantes mientras incursiona en lo oculto que las que podría experimentar mientras está llevando su cruz detrás de Cristo. Es que el mal tiene más glamour que una vida fiel a Dios».
«La gente está abandonando a Dios y entregándose al ocultismo, que es tan terrible para el alma, como el mismo Infierno.
«Las sesiones de espiritismo, en las que se evoca a los muertos para conseguir respuestas, están muy difundidas. Ahora se enseña a efectuar sesiones de espiritismo a través de computadoras, teléfonos celulares... Ya ni siquiera se necesita un ‘médium', cada quien puede hacerlo por sí mismo.
«De acuerdo con encuestas, el 37 % de los estudiantes han hecho, por lo menos una vez, el juego de la ouija, una verdadera sesión de espiritismo donde en verdad se invoca a los demonios y no a los difuntos como se cree, y quienes lo juegan sentirán la presencia real y maligna de estos espíritus del Infierno, ya que se los está llamando.
«Muchas personas terminan mal, trastornadas físicamente y psicológicamente. No pueden dormir, sienten la presencia de seres malignos que les rodean y le persiguen. De día y de noche se sienten angustiadas. Y es debido a la invocación de los espíritus.
«No existe diferencia entre magia blanca y magia negra. Cuando la magia funciona, siempre es obra del demonio. Todas las formas de ocultismo son puertas abiertas para el demonio y sus ángeles caídos».
P. Gabrielle Amorth, exorcista de la diócesis de Roma
«Juguetes» que no lo son
Aunque ya no es tan común verlas en los anaqueles de las tiendas, los tableros de la ouija se han comercializado en México por décadas como si se tratara de simples juegos como el ajedrez, las damas chinas o el dominó; y, de hecho, los mismos fabricantes de los verdaderos y tradicionales juegos de mesa también suelen manufacturar los tableros ouija para la práctica de espiritismo.
Hoy en el mundo hay de todo: ouijas de colección, ouijas que son un verdadero homenaje a la mariguana, guitarras eléctricas con ouija incluida, ouijas de valor artesanal, etc. Así se promocionaba en febrero de 2010 la venta de unas ouijas en el «Mercado Juárez» de Monterrey, Nuevo León, a través de un anuncio en internet: «¡Ouijas únicas, $380 pesos! Talladas en madera, elaboradas 100% a mano y ritualizadas libres de energías negativas, listas para ser utilizadas como portal de comunicación con el mas allá».
Pero lo más terrible es el descarado intento de introducir a los infantes en el mundo del satanismo y el ocultismo, pues ya se fabrican tableros ouija con las letras y números en alegres colores para que los niños en edad preescolar les tomen gusto; y la empresa Hasbro vende desde hace varios años en algunos países un lindo tablero ouija de color rosa para las niñas.
D.R.G.B.
Una práctica contra el primer mandamiento
«Cuida que la ouija no entre en tu hogar. No te dejes influenciar por los que dicen que es sólo un juego inofensivo: es un pecado contra el Primer Mandamiento. Si recuerdas haber invocado a algún espíritu a través de la ouija o de otra manera, arrepiéntete, confiésate y entrégale tu vida a Cristo, comprometiéndote a nunca más recurrir al ocultismo».
Este llamado lo hace el padre Jordi Rivero, fundador de la página www.corazones.org de la congregación de las Siervas de los Corazones Traspasados de Jesús y María, y unos de los sacerdotes católicos de habla española más activos en internet. El padre Jordi ha escrito varios artículos acerca de la ouija y de su incompatibilidad con la fe cristiana. Resumimos algunas de las ideas principales: .
- El «juego» de la ouija consiste en poner las manos sobre una pequeña plataforma que se desplaza sobre un tablero con números y letras, movida por alguna fuerza. La «diversión» está en la curiosidad de comunicarse con algún espíritu que supuestamente revela secretos.
- Mucha gente se ve atraída por el deseo de contactar con un ser querido ya muerto, otros sólo por curiosidad y otros para pasar el rato. Hay quien la utiliza para contactar con «extraterrestres» o con supuestos «ángeles».
ORÍGENES DE LA OUIJA
- Ya Pitágoras (540 a.C.) usaba «una tabla mística que se movía con ruedas» hacia signos que él y uno de sus estudiantes interpretaban a la audiencia como revelaciones del mundo invisible.
- En la China, antes del nacimiento de Confucio, se usaba algo similar con la pretensión de comunicarse con los espíritus de los muertos.
- La ouija, tal como hoy se conoce, fue diseñada en 1853, en Francia, por M. Planchette. En Estados Unidos, Elija J. Nond le hizo variaciones, y William Fuld la patentó. Finalmente, en 1966, «Parker Brothers» compró los derechos sobre la ouija.
CÓMO FUNCIONA
- «Parker Brothers» y otros fabricantes intentan enterrar la relación de la ouija con el ocultismo, por eso dicen que los jugadores buscan su «yo» subconsciente para obtener respuestas.
- La verdad es que, cuando el hombre se abre a buscar respuestas más allá de lo que se puede llegar por el uso de la razón, entra en el campo de lo sobrenatural, en el que sólo hay dos caminos: Dios y el demonio.
- La Iglesia aconseja no dar una explicación sobrenatural a lo que pueda ser explicado en el orden natural. Pero en ocasiones la ciencia no tiene explicación para la ouija.
- Numerosos testimonios indican que la ouija, cuando «funciona», suele dar consejos contrarios a la moral, y luego, progresivamente, desemboca en amenazas, violencia, suicidio, desesperación o presunción. Los resultados pueden ser obsesiones, ansiedad, ataques de pánico y otros desórdenes.
- Aunque se use la ouija por curiosidad, se está abriendo camino para el demonio y no es de extrañar que la persona quede espiritualmente afectada.
DIOS ADVIERTE
- Las Sagradas Escrituras nos exhortan: «Sed sobrios y velad. Vuestro adversario, el Diablo, ronda como león rugiente, buscando a quién devorar» (I Pe 5,8). Esta advertencia es necesaria porque el demonio realmente existe y realmente tiene acceso a nosotros por diversos medios, y es más fácil cuando practicamos lo que está claramente prohibido por Dios.
- Nadie que conozca y ame a Dios busca dirección por medio de la ouija. Dios se revela no por medio de juegos sino a través de su Hijo, Jesucristo, y Él confió su revelación a su Iglesia. Quien desea buscar la verdad debe acudir a las Escrituras y a las enseñanzas de la Iglesia.
- El Primer Mandamiento prohíbe apelar a otro espíritu fuera de Dios. El rey Saúl recurrió a una mujer de Endor para conjurar el espíritu del difunto profeta Samuel y fue castigado por Dios (cfr. I Sam 28, 8-17). Se trata del pecado de adivinación: querer «desvelar» el porvenir recurriendo a espíritus (que en realidad son demonios).
- No es lo mismo orar a los santos que invocar espíritus: 1) En la oración jamás se invoca a los santos por medio de oráculos o adivinación, sino que nos limitamos a pedirles que recen por nosotros y que nos ayuden en nuestro peregrinar hacia el Cielo. 2) Jamás buscamos en los santos otro camino u otro conocimiento sino el Evangelio ya proclamado por Jesucristo.
Atrapados por la ouija
Para conocer de qué tamaño es ya el problema de la ouija basta con recurrir al sitio católico www.corazones.org, donde se lee una gran cantidad de consultas, especialmente de adolescentes. Aquí extractamos tanto algunos de esos correos como las respuestas dadas por el padre Jordi Rivero:
- Tengo 15 años y una gran curiosidad por jugar al juego de la copa (ouija); pero tengo mucho miedo de que el espíritu se quede en mi casa.
- Hay cosas que no hay que probar para saber que son muy dañinas. ¿Se te ocurre tirarte de un edificio por curiosidad? Claro que no. La razón de tu curiosidad por la ouija es que te has alejado de Jesucristo. Tienes un vacío en tu alma que sólo Él puede llenar .
- Unos amigos quieren jugar a la ouija. Por mucho que les diga yo, no lo podré evitar. ¿Y si hago un tablero falso para que no pase nada?
- No es el tipo de tablero sino la intención de adivinación lo hace que la ouija sea pecado.
- He intentado una millonada de veces a la ouija, pero cuando yo estoy nunca se ha movido, ¿será porque Dios me está protegiendo?
- Dios te ama y te ha protegido; pero si insistes en abandonarlo, no te va a retener contra tu voluntad.
- Tengo 17 años. Intentamos muchas veces jugar pero no logramos que se moviera la copa.
- Muchas veces no ocurre nada porque el demonio no es todopoderoso y no siempre puede actuar.
-Jugamos con la ouija, pero no sabemos si fue válido porque lo hicimos en una caja de cartón.
- Nada es válido cuando es contrario al amor de Dios. Por ejemplo, si alguien te insulta, no importa si lo hace por escrito o a viva voz. El mal es mal, no importa como venga envuelto.
- ¿Si Dios no quiere que juguemos con espíritus, por qué no nos da Él mismo las respuestas?
- Dios ya nos las dio: nos reveló todo lo necesario para conocerle y salvarnos.
- No soy católico. En realidad me gusta más conversar con el Diablo que con Dios. Creo que existe Dios, pero no lo adoro. He jugado a la copa, y en unos días voy a pactar con el Diablo porque lo que le pida él me lo va a dar.
- Muchos esperan del demonio regalos. No comprenden que al recurrir a él caen bajo su dominio en calidad de esclavos.
- Mis amigos y yo tenemos demasiadas ganas de jugar. Yo creo en Dios y siempre rezo, voy a Misa, y sé que después de que juegue me debo ir a confesar; pero quiero jugar solamente una vez, aunque tengo miedo de que la ouija me haga algo.
- Si amas a alguien no le querrás insultar «sólo una vez». Fíjate que en ningún momento has pensado en el amor de Dios, sólo en tu propio miedo. Descubre tu egoísmo y renuncia al mal. En cuanto a esas confesiones premeditadas antes del pecado, recuerda que la confesión no es válida si no hay arrepentimiento y dolor del pecado. No sabes si tendrás arrepentimiento después de pecar si ahora mismo no lo hay.
- Tengo 16 años y juego a la ouija desde mis 8. Sólo ha contactado conmigo el «Demonio José». Tras varios años de amistad con él, me ha dicho que quiere convertirme en mensajero del diablo, prometiéndome muchas cosas hermosas. Creo que es mejor estar del lado del diablo que entrometerse en su camino.
- El demonio ha logrado envenenar tu alma y hacerte creer que es mejor estar de su parte; habiendo logrado eso no tiene necesidad de más.
- Tenemos 17 años. Estudiamos en un colegio católico y nunca nos han dicho que la ouija sea mala. Siempre nos dicen los espíritus con los que jugamos que son buenos y nos hablan muy bien sobre Dios. Nunca nos sucedió nada malo.
- Ustedes dicen que nada malo les ha ocurrido con la ouija. Les digo que sí: cada vez que juegan se van apartando de Dios. La ouija parece decirles cosas bonitas: es la estrategia del demonio, pues sabe que hablando «bonito» es la mejor manera de engañarles. El diablo se presta aun a rezar si con eso puede engañar.
- Deseo probar la ouija, no le tengo miedo a Satanás. No creo mucho en Dios, y no me conteste que rezará por mi alma porque, para ser verdad, tampoco creo en el Cielo. Si no me contesta me veré obligado a satisfacer mi curiosidad.
- Me da mucha pena tu actitud de desprecio a Dios. Si tuvieras mas interés en conocerlo, lo encontrarías y serías feliz. Tratas de amenazarme diciendo: «si no me contesta me veré obligado a satisfacer mi curiosidad». Eres libre y nadie te obliga. Tus decisiones tendrán consecuencias. Si haces el mal me dará pena, pero eres tú mismo quien te haces daño. Yo también soy libre y, por eso, aunque no lo aprecies, rezaré por ti para que abras tu corazón al amor de Dios.
- Tengo muchos amigos y amigas que juegan a la ouija y me invitan, pero aún no estoy convencido. Nos vamos a reunir en Halloween en un cementerio; están tan alucinados que quieren empezar a las 12:00 de la noche, y con velas negras. Deme cinco razones para no jugar.
- Parece que aún no entiendes. La vida en la tierra es muy corta y después será la vida eterna. Ahora te estas jugando la eternidad. Ahora me pides cinco razones para no jugar, pero sólo te daré una razón: la ouija no es de Dios, jugarla es andar por caminos de perdición y exponerte a perder tu alma. Allá tú. Si no tienes seriedad en lo que debe ser serio no habrá manera de que te pueda convencer.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario