PALABRAS DEL SANTO CURA DE ARS SOBRE EL SACERDOTE
Es el sacerdote que continúa la obra de Redención sobre la tierra.
Cuando veis al sacerdote, pensáis en Nuestro Señor Jesucristo.
El sacerdote no es sacerdote para él mismo, lo es para vosotros.
Vais a confesaros con la Santa Virgen o con un ángel. ¿Os absolverán? ¿Os darán el cuerpo y la sangre de Nuestro Señor? No, la Santa Virgen no puede hacer descender su Hijo divino en la hostia. Aunque tuvierais doscientos ángeles para vosotros allá, no os podrían absolver. Un sacerdote, por cuanto simple sea, puede hacerlo. Os puede decir: andáis en paz, os perdono.
¡Oh! ¡el sacerdote es de veras algo grande!
Un buen pastor, un pastor según el corazón de Dios, es el más grande tesoro que el buen Dios pueda conceder a una parroquia y uno de los dones más preciosos de la misericordia
“El sacerdote debe sentir la misma alegría (de los apóstoles) al ver a Nuestro Señor, al que tiene entre las manos” (Santo Cura de Ars)
"El sacerdocio es el amor del corazón de Jesús" (Santo Cura de Ars)
“Piensan que no tiene sentido recibir la absolución hoy, sabiendo que mañana cometerán nuevamente los mismos pecados. Pero Dios mismo olvida en ese momento los pecados de mañana, para darles su gracia hoy.” (Santo Cura de Ars)
“El medio más sencillo de encender esta llama –el amor de nuestro Señor- en el corazón de los fieles es explicarles el Evangelio.” (Cura de Ars)
“La gracia de Dios nos ayuda a andar y nos sostiene. Nos es tan necesaria como las muletas a un lisiado.” (Santo Cura de Ars)
“Las gentes mundanas no tienen al Espíritu Santo; o, si lo tienen, no es más que de paso: Él no se detiene en ellos. El ruido del mundo le hace marcharse.” (Santo Cura de Ars)
“Si preguntáramos a los condenados: ‘¿Por qué están en el infierno?’, responderían: ‘Por haber resistido al Espíritu Santo’. Si dijéramos a los santos: ‘¿Por qué están en el cielo?’, responderían: ‘Por haber escuchado al Espíritu Santo’.” (Santo Cura de Ars)
“Para el hombre que se deja conducir por el Espíritu Santo parece que no hay mundo; para el mundo, parece que no hay Dios.” (Santo Cura de Ars)
“Sin el Espíritu Santo, somos como una piedra de las que encontramos en el camino. Toma en una mano una esponja empapada de agua y en la otra una piedra; apriétalas igualmente. No saldrá nada de la piedra, y de la esponja verás salir el agua en abundancia. La esponja es el alma llena del Espíritu Santo; y la piedra es el corazón frío y duro donde el Espíritu Santo no vive.” (Santo Cura de Ars)
“Los santos son como multitud de pequeños espejos en los que Jesucristo se contempla.” (Santo Cura de Ars)
“Un buen cristiano, un avaro del cielo, hace poco caso de los bienes de la tierra; sólo piensa en embellecer su alma, en obtener lo que debe contentarlo siempre, lo que debe durar siempre.” (Santo Cura de Ars)
“Los buenos cristianos que trabajan en salvar su alma están siempre felices y contentos; gozan por adelantado de la felicidad del cielo; serán felices toda la eternidad. Mientras que los malos cristianos que se condenan siempre se quejan, murmuran, están tristes… y lo estarán toda la eternidad.” (Santo Cura de Ars)
“Muchos cristianos no trabajan más que para satisfacer este cadáver –al cuerpo siempre lo llamaba ‘cadáver’- que pronto se pudrirá en la tierra; y, sin embargo, no piensan en su pobre alma, que debe ser eternamente feliz o infeliz. Carecen de espíritu y de buen sentido: ¡esto hace temblar!” (Santo Cura de Ars)
“El buen cristiano recorre el camino de este mundo subido en una bonita carroza de triunfo; esta carroza es arrastrada por ángeles y es nuestro Señor quien la conduce. Mientras que el pobre pecador está enganchado al carro de la vida, y el demonio está en el asiento y le hace avanzar a golpes de látigo.” (Santo Cura de Ars)
“¿Sabéis cuál es la primera tentación que el demonio presenta a una persona que ha comenzado a servir mejor a Dios?. Es el respeto humano”. (Santo Cura de Ars)
“Todas las buenas obras del mundo reunidas, no equivalen al Santo Sacrificio de la Misa, porque son obras de los hombres, mientras que la Misa es obra de Dios.” (El Santo Cura de Ars)
“No es Dios quien nos condena, somos nosotros, por nuestros pecados. Los condenados no acusan a Dios; se acusan ellos mismos; dice: ‘He perdido a Dios, mi alma y el cielo por mi culpa’.” (Santo Cura de Ars)
“Si preguntáramos a los condenados: ‘¿Por qué están en el infierno?’, responderían: ‘Por haber resistido al Espíritu Santo’. Si dijéramos a los santos: ‘¿Por qué están en el cielo?’, responderían: ‘Por haber escuchado al Espíritu Santo’.” (Santo Cura de Ars)
y San Juan Maria Vianey donde quedo que no lo veo
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